Triste día...

A pesar de ser un maravilloso y soleado día de abril, el mes no ha empezado con buen pie. Dicen que después de una tempestad, siempre viene la calma, en mí ocurre todo lo contrario: por cada día bueno que tengo, siempre hay 5 malos.

Este fín de semana ha sido espectacular: me fuí a ver a mi niño y estuve con él casi cinco días. Pero a la vuelta, a pesar de saber más o menos lo que me esperaba, no sabía la magnitud de las presiones.

Desde que soy una perra por no haber acabado ya la carrera, hasta que mi propia hermana parece ser que sabe mejor que nadie que no me van a convalidar muchas para poder irme a Talavera de la Reina a acabar la carrera. Y cuando le he preguntado de dónde ha salido esa idea, va y me dice que se lo he dicho yo. Y que si mi madre se peleó conmigo por eso, yo también le hago de tener broncas con mis padres porque no la ayudo a convencerlos de que se vaya a Valencia a vivir con el novio. Si, es que es lo mismo, no te fastidia... Le he dicho que a partir de ahora se ocupe de sus asuntos, que yo velaré por los míos.

Total, que parece ser que los únicos que me animan para irme y vivir un poco más desahogadamente son el nene y Gwiyath (bueno, y cuatro más, que, aunque no les importa lo que haga o deje de hacer, al menos tampoco les importa lo contrario).

También me regañó por haber perdido clase, porque había visto a la vecina y ella sí había tenido: ¿es que no le entra en la cabeza que no tenemos las mismas asignaturas y por lo tanto puede que yo no tenga clase y ella sí? Pues otra pataleta...

Y lo peor: nada más llegar, yo tan contenta le dije a mi padre que había aguantado como una campeona la caminata de 22kms. a la que nos apuntamos el sábado, y mi padre venga meterse conmigo: "claro, como ibas con Jose Ángel pues la acabas, pero si te dice tu madre que vayas a la farmacia de la esquina, estás cansada..." ¡¡Y una mierda!! (con perdón de la expresión). Siempre he ido a todos los recados, y andando, no como ellos que necesitan el coche hasta para ir al servicio. Sólo les respondí que cuando quieran saber de mí que pregunten, que ya veré lo que contesto...

Estoy deprimida y cansada siempre de lo mismo, no es justo... ¿Por qué siempre a mí? No veo más que enemigos por todos lados que se empeñan en hacerme la vida imposible. Pero tengo que ser fuerte, lo sé.

Y esto no se ha acabado. Esta mediodía me espera otra y creo que peor. Intentaré ir con la cabeza bien alta y el espero que poco tiempo que me queda de estar viviendo con ellos, sobrellevarlo lo mejor que pueda.

Que tengais una buena semana (al menos mejor que la mía). Besitos...